Ray Bradbury, 1920-2012.
"... El alba de Marte fue tranquila, tan
tranquila como un pozo fresco y negro, con estrellas que brillaban en
las aguas de los canales, y respirando en todos los cuartos, niños
que dormían encogidos con arañas en las manos cerradas, y amantes
abrazados, y un cielo sin lunas, y antorchas frías, y desiertos
anfiteatros de piedra.
Sólo rompió el silencio, poco antes de
amanecer, un sereno que caminaba por una calle distante, solitaria y
oscura, entonando una canción muy extraña..."
Ray Bradbury. Noche de verano.
(Crónicas marcianas, 1950)
2 comentarios:
Buen viaje, señor de Marte. Que las estrellas te hagan pasar tan buenos ratos como nosotros los hemos tenido con tus novelas.
Señor Bradbury, gracias por llevarnos a Marte. Mientras usted sigue su camino, nosotros seguiremos leyéndole.
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